De acuerdo con el informe efectuado por la Región Sanitaria VIII durante el período comprendido entre los meses de enero y octubre de este año se registraron 111 casos de Coqueluche o Tos Convulsa de los cuales el 90% pertenecen a Mar del Plata.
Sobre esa cantidad de casos, 12 niños fallecieron como causa de la mencionada enfermedad. Según el informe, en su mayoría eran menores de 2 meses de edad, con padres jóvenes de entre 16 y 21 años con vacunación incompleta.
Para el médico pediatra Jorge Villegas resulta que “es evidente que estamos frente a un brote de tos convulsa, conocerla nos ayudará y nos dará los elementos para actuar en consecuencia”.
En una gacetilla de prensa, el profesional la definió como “una enfermedad infecciosa aguda de las vías aéreas, altamente contagiosa, cuyo principal agente causal es Bordetella pertussis. A pesar del uso masivo de la vacuna contra esta enfermedad, se ha informado mundialmente su resurgencia, aun en poblaciones con alta cobertura de vacunación, con un cambio en el perfil epidemiológico. Al grupo de alto riesgo constituido por menores de 1 año de edad, se han sumado escolares, adolescentes y adultos jóvenes, que actuarían como reservorio y agentes de transmisión de la misma”.
Aclaró, además, que “el ser humano es el único reservorio que trasmite la enfermedad a través de las secreciones respiratorias. Es decir por contacto directo de persona a persona, por gotitas de secreciones respiratorias de individuos infectados. Es altamente contagiosa si la exposición con el infectado es prolongada y estrecha (hogar, colegio, jardín de infantes, por ejemplo)”.
Para el especialista las causas del brote se deben a varios motivos, entre ellos enumeró: “El incumplimiento de la vacunación obligatoria (el 95% es la cobertura mínima de vacunación recomendada por la OMS), la sospecha de variantes de la cepa de Bordetella Pertussis, no incluidas en las vacunas y el subdiagnostico de adolescentes y adultos que permitiría la circulación de la enfermedad” y agregó que “se sabe que la inmunidad dada por las vacunas declina a partir de los 5 años de aplicada (a partir de 2010 se introdujo a los 11 años con carácter obligatorio la vacuna Triple Bacteriana Acelular, que actúa contra Tétanos, Difteria y Tos Convulsa”.
Acerca de los síntomas que presenta el coqueluche, señaló que “dicha enfermedad tiene una sintomatología que varía desde una forma leve hasta formas severas, esto depende de la edad de los pacientes y según posean o no esquema de vacunación completa. Los pacientes con mayor riesgo son los menores de un año, y de este grupo etario los mas vulnerables son los menores de 2 meses de edad. Clínicamente la enfermedad posee una fase Catarral que dura entre 7 a 14 días caracterizada por una tos paroxística a predominio nocturno”.
Con respecto a cómo afecta a los recién nacidos destacó que “en los lactantes pequeños se puede manifestar con apneas y cianosis (períodos pequeños sin respiración y color azulado de la piel). A esta etapa le sigue una fase paroxística caracterizada por accesos repetidos y violentos de tos, esta etapa dura entre 1 a 6 semanas, por último aparece un periodo de convalecencia con disminución gradual y progresiva de los accesos de tos, dura entre 2 a 3 semanas”.
Consultado el doctor Villegas sobre los riesgos en pacientes adultos puntualizó que “un problema que vemos es que los síntomas son mas leves en los adultos donde solamente puede observarse tos seca persistente (mas de 14 días)” y advirtió que “muchos médicos podrían no darse cuenta que están frente a un paciente con tos convulsa, y así el enfermo contagiar a los mas pequeños, siendo estos los mas vulnerables”, finalizó.
Desde el Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires – IX Distrito señalaron que “las herramientas más eficaces para su prevención son: controlar el esquema de vacunación en todas las consultas al hospital o centro de salud municipales o privados, para detectar esquemas incompletos; incrementar la difusión de dosis de vacuna Triple Bacteriana Acelular a los 11 años; vacunar a todos los convivientes (madre, padre) o cuidadores, de menores de 1 año; evaluar vacunación Triple Bacteriana Acelular en el último trimestre de embarazo; evitar la exposición de niños menores de un año a reuniones por el riesgo de contagio de la enfermedad; consultar a los centros de salud públicos o privados ante la sospecha de Tos Convulsa e intensificar la vigilancia para esta enfermedad”.
Autor / Fuente: www.0223.com.ar
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